Descripción
El raspador de lengua es ideal para quitar la pasta blanquecina o amarillenta producida por la flora bacteriana de la superficie de la lengua al eliminar los tóxicos corporales. Su perfil más bajo que cualquier cepillo lingual, permite que el raspado vaya más adentro de la lengua sin tener náuseas. Su uso constante da como resultado menos placa y un mejor aliento.
Utilizar todas las mañanas según se levante de la cama y antes de ingerir cualquier alimento. Realizar 2 o 3 pasadas suaves sobre la lengua hasta eliminar la capa que la recubre.